Dos músicos de dos escenas muy distintas, pero con gran influencia en la suya nos abandonaron en un mismo día: Paul Di'Anno, exvocalista de Iron Maiden, y Egidio Cuadrado, acordeonero de La Provincia, grupo que lo catapultó a él y a Carlos Vives a la fama.
Era el año 1985, Egidio Cuadrado intentaba por tercera vez consecutiva ganar el honor de ser Rey del Festival de la Leyenda Vallenata. Su esperada consagración después de tanta espera cambió lo que sería el resto de su vida, ganándose entre otras cosas, un lugar fundamental dentro de la historia de la música en Colombia al hacer parte de los músicos que participaron en la banda sonora de Escalona, novela basada en la vida de Rafael Escalona. Fue entonces cuando, junto a Carlos Vives, comenzó una aventura sónica que cambiaría el curso de la música y el folclor colombiano, fusionando el vallenato con otros géneros como el rock, haciendo que seguidores del rock duro y el heavy metal, como yo, vieran como aceptable escuchar vallenato. Su proeza con el acordeón quedará eternamente plasmada en canciones como La gota fría y La tierra del olvido, una de las mejores canciones, tal vez la mejor, de la historia de la música en Colombia.
En 1980 una pequeña banda de Inglaterra comenzaba a ondear la bandera del metal británico muy en alto. Con influencias punk mezcladas con guitarras metaleras, Iron Maiden se hizo sentir e iniciaron su camino a convertirse en la fuerza musical que son hoy. Si bien el Maiden que conocemos hoy es musicalmente MUY distinto al de sus dos primeros álbumes (Iron Maiden y Killers), su grandeza era evidente desde el arranque. La vibra punk de Di'Anno está plasmada en canciones como Wrathchild, Charlotte the Harlot, Running Free, y Iron Maiden. Tras los dos primeros lanzamientos, los integrantes de Iron Maiden decidieron despedir a Di'Anno para reemplazarlo con Bruce Dickinson. Desde entonces Di'Anno intentó seguir vigente con otros proyectos, pero lastimosamente ninguno logró mayor relevancia. A pesar de esto, su voltaje y resiliencia lo impulsaron a seguir en los escenarios incluso hasta agosto del presente año, cuando se presentó por última vez en vivo. Sin importar sus múltiples complicaciones de salud, Di'Anno impuso su amor por la música antes que rendirse y, con silla de ruedas abordo, no dejó de rockear hasta el final , siendo un enorme ejemplo de lucha y perserverancia.
Paz en sus tumbas.
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