viernes, 7 de diciembre de 2012

The Black Saints- Reivindicando el Rock Sucio y Explosivo



Cuando uno piensa en rock estadounidense, inmediatamente piensa en ciudades como Los Angeles, cuna de cientos de las más importantes bandas en la historia del rock del país del tío Sam. Sin embargo, a casi 3.000 kilómetros de distancia, en Milwaukee-Wisconsin, The Black Saints comienza a ondear la bandera del rock en una ciudad que no se caracteriza por una gran producción de grupos famosos de rock, salvo –tal vez- por Violent Femmes.

Formados a comienzos de 2009, estos santos negros del rock n roll llegaron para predicar al mundo acerca de aquello que poco a poco se ha ido perdiendo en el género: guitarras candentes, voz feroz y canciones explosivas. Un formato musical que, tristemente, ha perdido terreno ante uno más cuadriculado y aburrido. Si bien el ascenso de un grupo puede ser largo y complejo, este ha logrado en muy corto tiempo cosas importantes. Tocar junto a Ace Frehley (Kiss), Blind Melon, Sevendust, Steel Panther, entre otros, y que su música suene en países como Canadá, Colombia e Inglaterra son apenas algunos de sus logros.

Su EP debut All Sinners Welcome, lanzado en 2010, es una oda a ese rock de Los Angeles que tanto ha marcado el sonido de la agrupación. A pesar de la distancia entre ciudades, el legado angelino de grupos como Guns N´ Roses y Mötley Crüe se siente de forma contundente a lo largo de sus seis canciones. Letras dedicadas a la calle, las mujeres y la vida nocturna hacen que las composiciones de The Black Saints adquieran un status de clásico instantáneo. Basta con oír Dead Man Walking, canción que me dejó con la boca abierta cuando la oí por primera vez en 2010. La furia colectiva de la parte instrumental, más la voz agresiva y estridente de Drew Herdegen (cuyos gritos envidiaría la versión 2012 de Axl Rose) hacen de la canción una joya digna de oír una y otra vez…al menos eso fue lo que yo hice. 


Hoy, 7 de diciembre de 2012, sale a la venta su segundo EP: Hellbent & Heartless. Cinco canciones que muestran al grupo madurando a pasos agigantados. Conservando aún ese fuego que los caracteriza, The Black Saints explora lugares previamente inexplorados, coquetea con aspectos musicales un tanto más melódicos, e incluso se la juega con una clásica power ballad ochentera: Amends, un himno al dolor causado por el desamor.

Constantemente busco música nueva. Me gusta retar mis oídos, evolucionar. Por ende, la cantidad de música nueva que oigo cada año es innumerable. La música que hace The Black Saints ha satisfecho mi insaciable curiosidad melómana. Uno de los descubrimientos musicales más valiosos que he hecho en los últimos años, sin duda. Si le gusta el hard rock, hágase un favor y oiga su música. Búsquelos en su página oficial, en iTunes, Amazon, no sé. Cuando los encuentre, suba al volumen al máximo y prepárese su cabeza para una intensa sesión de headbanging









No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Deja tus críticas, reclamos, flores, insultos aquí!